Una herida se define como toda pérdida de continuidad en la piel, en esta situación el principal mecanismo protector del cuerpo, se ve afectada por lo que nos encontramos expuestos a cualquier tipo de agente agresor, además, dependiendo del lugar y la gravedad de la herida esta puede traer consigo posibles lesiones en órganos o tejidos adyacentes.
Sin embargo, como es obvio no todas las heridas son iguales, la gravedad con que se presente de dependerá de la naturaleza y la ubicación de la misma, dependiendo de estos factores el tratamiento y cuidado de la herida podrá variar desde la simple colocación de apósitos en casa hasta la necesidad intervención médica.
La gravedad de una herida
Las heridas pueden ser de distinta naturaleza, ya sea causada accidentalmente, o por la intervención médica ya sea a través de una incisión quirúrgica o por medio de procedimientos invasivos como la colocación de un catéter.
El cuidado que requiere una herida será determinado principalmente por la naturaleza, la amplitud y la profundidad, además de factores como la limpieza de la herida que reflejará el riesgo de infección que esta pueda presentar, en este sentido las heridas quirúrgicas suelen ser menos proclives a infección mientras que las heridas accidentales suelen ser más susceptibles.
¿Cómo debe ser el cuidado de una herida?
El Dependiendo de la gravedad que está presente, existen heridas superficiales que pueden ser cuidadas en casa y heridas más profundas que requerirán un tratamiento y vigilancia médica, también existen las heridas de origen médico, como las postoperatorias que en la mayoría de los casos pueden ser tratadas desde el hogar.
Heridas superficiales
son aquellas donde generalmente el tamaño y la profundidad de la lesión son pequeñas, usualmente no presentan hemorragia, o esta es muy leve por lo que sede con en uso de algodón o un apósito, cuando la hemorragia es más abundante debe colocarse vendas.
heridas profundas
Se deben lavar con solución fisiológica, cuando la amplitud es importante, es necesario la utilización de suturas por parte del equipo médico, en estos casos siempre es importante controlar la hemorragia cubriéndola con un apósito estéril, dependiendo de su localización algunas heridas pueden requerir la inmovilización lo que se logra utilizando un vendaje sostenido con esparadrapo.
Heridas post operatorias
Cerradas con suturas, grapas o suturas adhesivas cutaneas, Para cuidar este tipo de heridas es esencial seguir las indicaciones médicas, quien le explicara cómo y cuándo realizar los cambios de vendajes y apósitos, así como la limpieza de la herida, esta última se debe realizar con gasas estériles porque no dejan pelusa, lo que evita el riesgo de infecciones.
El cuidado de heridas siempre debe realizarse bajo las mejores condiciones de higiene posibles, procurando un adecuado control de infecciones, además se debe tener en cuenta la escogencia adecuada de Productos indicados para el tratamiento y cuidado de heridas, según sus necesidades.
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